Soltarse completamente
en el tiempo,
en la fresca tierra,
dejando que todo
pase,
sin prisa,
sin miedo;
dibujando en la
arena,
castillos y
estrellas.
Volver a ser
niños,
sin orgullo y
prejuicios;
perderse en el
verde,
en el azul;
girar incansables,
como lo hacen
los planetas
y los molinos de
viento.
Croar como ranas
en la espesura
de la pródiga hojarasca,
iluminar la
noche
como
luciérnagas,
zumbar como el
viento,
amar como
palomas,
en las torres de las iglesias
trepar en la
selva,
alcanzando el
sol,
la luna, las estrellas
y un nuevo
planeta.
Dejarnos
arrullar,
mecidos por el
viento
en las vigorosas
ramas,
en el copo de las guaduas.
en el copo de las guaduas.
Volver a nacer
sin prisa,
sin miedo al
reloj de arena,
porque
vienen tiempos
primaverales, de
bonanza,
cubriendo
nuestro suelo,
con tormentas con el polvo
y la nieve del progreso,
y la nieve del progreso,
huracanes de
pasión,
inundando totalmente,
nuestros hogares,
con delicioso
sabores
y un millón de bendiciones.
Prepárate...
abre tu corazón,
porque se acercan
grandes oleajes,
erupcionarán volcanes,
que todos nos cubrirá,
con la lluvia de la felicidad.
Prepárate...
abre tu corazón,
porque se acercan
grandes oleajes,
erupcionarán volcanes,
que todos nos cubrirá,
con la lluvia de la felicidad.