miércoles, 20 de enero de 2021

Una nueva esperanza se abre hoy para la humanidad








https://es-us.deportes.yahoo.com/noticias/presidente-estemos-turba-asalt%C3%B3-capitolio-182002672.html

https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-55710108


https://www.jornada.com.mx/notas/2021/01/20/mundo/sale-trump-de-la-casa-blanca/



                                                                     Se abre  el telón,

cámaras, acción,

se inicia el rodaje

escena uno,

atentos todos

para esta nueva 

obra de teatro,

cuento:

uno 

dos 

tres:


Iniciamos con el primer guion,

esperemos no haya interrupción,

el anhelante público espera,

los alrededores están custodiados

por  el más grande batallón,

se inicia la acción.


Una nueva esperanza se abre hoy para la humanidad.

Se marcha cabizbajo Trump, sube al escenario

con la cabeza en alto Biden a pleno sol

con el rostro iluminado, 

Él y su Comitiva

con el tapaboca bien asegurado.



Por fin hoy primer día sin Trump,

por fin puedo escribir Trump sin sentir temor

y ese agobiante dolor e impotencia,

por fin un gobierno que parece ser para

los sufridos y abandonados por  Trump

y los que diseñaron el déspota proyecto

de América para los americanos,

robándole el maravilloso y exótico  botín a Europa,

por llegó el  fin de la era Trump 

que hasta el final sonó a trueno;

cesó la borrasca y  la temible tempestad.

 

 

El Thor griego pero que también

pretendía ser el Zeus del mundo,

en soledad marchó;

esperemos alborozados

que prevalezca en su agenda

internacional  de Joe la paz

sin muros, cadenas, penas capitales,

pobreza, humillación y desigualdad,

esperemos rodeados de  espereza

en esta órbita sideral,

la bonanza de la paz y el  bienestar.

 

Cesarán los hostigamientos

entre hermanos y naciones,

los dineros de la guerra

 fortalecerán la unidad internacional,

brotarán en esta sedienta tierra

 las semillas de la fraternidad.

 

Cuanto  esperé este día,

cargado de  sueños y esperanzas,

cesará la despiadada y humillante

 diáspora venezolana, sus muertes

en medio de los odios

 en el  donde se  

 han tenido que exiliar.

 

En  su amada Venezuela

 recibirán la añorada

felicidad y progreso,

gracias a la ayuda internacional.

 

Se acerca la paz internacional,

que la anunciaba la paloma Joe,

recorriendo 13 mil kilómetros,

desde Oregón hasta Melbourne

y perdonándole su vida

el temido verdugo.  

 

Biden cargado de nobles mujeres,

sabios y humildes hombres,

devolverán al mundo

la tranquilidad, equilibrio y estabilidad,

con el Coronavirus nos basta ya,

para esta sufrida y golpeada humanidad.

 

Sí queremos recuperar lo perdido,

 ganemos, conquistemos la naturaleza y dominemos

las bajas pasiones, cargadas de codicia y poder;

esperemos que esa codicia desmedida

no salpique al Biden entrante,

que ha conocido la quiebra y la perdida

del ser amado, subiendo del infierno al cielo

cuando ya nada parece ganado.

 

Una promesa se abre hoy para la humanidad,

 sin supremacía blanca,

ahora cada mano recibirá su ayuda

de este gran imperio que hoy

 será conquistado para

 bien de  la humanidad.


Ni las rabias, cuernos, conjuros,

ni las banderas, lanzas,

 turbas,  estampidas, gritos,

impidieron que Biden

llegara a la casa Blanca sin mitin,

sin violencia,

con una agenda en mano

y el pueblo norteamericano

esperando que con sabiduría

les tienda la mano.

 

Semillas de esperanza y felicidad

 hoy cubren las cenizas

de los muertos por absurdas guerras,

hoy miércoles brilla un nuevo sol

 en este 20 de enero de 2021

para esta anhelante y golpeada humanidad,

hoy de las cenizas,  de nuevo brotará

el Maná muy lejos del río Jordán.



jueves, 14 de enero de 2021

"Por temor a enfermedades, Australia sacrificaría a paloma mensajera que viajó 13.000 kilómetros", no lo permitamos son las injusticias del Coronavirus y su cacería de brujas

 


Dr. Scott Morrison

Mandatario Australia

Atento saludo


Respetuosamente solicito no sacrificar la paloma mensajera que por error llegó a su país, es una héroe haber atravesado tanta distancia por ser utilizada en un concurso de Estados Unidos; pónganla en cuarentena, pero no la sacrifiquen, la pandemia debe humanizarnos y ponernos en armonía con la naturaleza; los animales no son culpables del daño que los humanos ocasionamos al medio ambiente, hemos victimizado los animales y ahora los consideramos culpables de nuestros destrozos  y contaminación ambiental y el daño que éste ha generado.


 Se que la salvará, gracias de antemano; de lo contrario la historia rechazará este crimen ambiental, ninguna cultura en la historia ha hecho esto,  para que Ustedes lo hagan; las crisis del Coronavirus nos vuelve irracionales y nos pone en la búsqueda de culpables y chivos expiatorios, evitemos cometer  en este tipo de injusticia.El miedo y la inseguridad llevan a los peores errores como la inquisición en la edad media.


"Por temor a enfermedades, Australia sacrificaría a paloma mensajera que viajó 13.000 kilómetros"

https://www.msn.com/es-co/noticias/mundo/por-temor-a-enfermedades-australia-sacrificar%C3%ADa-a-paloma-mensajera-que-viaj%C3%B3-13-000-kil%C3%B3metros/ar-BB1cKIEO?ocid=msedgdhp

Mi hermano cuida las palomas y nunca ha contraído el virus.

https://gente.com.co/Hombre-de-Envigado-entrena-palomas-mensajeras


Cordialmente,

Piedad Acosta Ruiz

Colombia 

viernes, 8 de enero de 2021

Carta en medio de la pandemia, tanto escribí, Lylliana Acosta Ruiz, cavilante en la pandemia

 

CARTA EN MEDIO DE LA PANDEMIA


29 de abril de 2020





Un día más de todo este inentendible caos en que nos encontramos sumidos, sin encontrar respuesta alguna a tantas y tantas adversidades, siento que es imposible creer en esto, no sé si es real o un sueño, parece un capítulo de una novela de terror.

 Lo que hace unos pocos meses eran unos días rutinarios, ahora están convertidos en la peor pesadilla vivida en historia, esclavizada a la tecnología, a una plataforma, a un whatsapp, a un correo electrónico a un celular, a tratar de estar presente a través de mis mensajes en la vida de muchas personas, ignorando todas ellas como me siento, no sintiendo tanto dolor, tanto vacío existencial que hay detrás de una pantalla de un dispositivo electrónico.

 No sé qué es peor, si estar despierta o dormida, despierta consciente de este infierno, o dormida queriendo permanecer así por el resto de mis días, no estando consciente de en qué momento estoy en esta situación, sumida en la más profunda tristeza, deseando volver al pasado y sentir la felicidad de ese tiempo, solo el escuchar la música me transporta a los mejores años de mi vida, cuando era feliz y nunca me di cuenta.

Autor 

Lylliana Acosta Ruiz

Seudónimo:

Menugel Beguín







TANTO ESCRIBÍ

 

Fueron muchas palabras que escribí, muchas las borré, otras están plasmadas en mi mente. Son muchas ideas, siento unas ganas de comunicarme, de expresar las vivencias, de dejarme llevar por términos, por expresiones, por sentimientos, por experiencias; a través de mis palabras quiero regresar a mi pasado, a pasajes  de mi  infancia, de recorrer con mi imaginación  esos lugares mágicos llenos de fantasías, de seres casi  mitológicos, de poder sentir la felicidad  de percibir la naturaleza , de encontrar en los pequeños detalles la esencia de mi vida.

Espero nunca se borren de mi mente esos momentos, es más, solo mi imaginación los puede reproducir como un dispositivo de almacenamiento de información. ¿Es posible volver a los momentos que nos hicieron felices? Creo que sí. Solo que ahora no están los seres mitológicos, sino estoy acompañada de algo llamado realidad.

 

Autor 

Lylliana Acosta Ruiz

Seudónimo:

Menugel Beguín

  

CLAROSCURO VIVENCIAS EN LA GRUA. PARTE 2. DESAFIO, Silvia María Acosta Ruiz, La héroe de la grúa


Lo que cuesta es lo que nos hace grandes.






A veces los temores nos invaden, se apoderan de nosotros y no nos permiten avanzar en la vida. Tal vez estos son heredados, infundados o adquiridos por experiencias negativas, pero el caso es que esa sensación  que invade tu cuerpo y en especial tu mente si no la vences puede truncar toda tu vida.

En mi niñez fui siempre una niña tímida, tal vez por haber recibido maltrato físico y psicológico, sentía temor de hablar, de socializar, de perder y de muchas cosas más. Estas sensaciones no me permitían tener una vida social normal y a pesar de ser buena estudiante me frustraba de una forma increíble no tener amigos, no poder participar  en las clases, etc. Pero ya terminanda mi escuela primaria tuve la fortuna de tener un gran profesor “un gran maestro” el profe Francisco que me dio muchas lecciones de vida, pero la más importante fue la clave para vencer mis miedos. Él me decía si tienes miedo de hablar habla y habla mucho, pero mucho no importa que te equivoques, que se burlen de ti, que se te enreden las palabras pero hazlo y veraz que poco a poco lo vencerás, porque lo más importante y el mayor desafío para vencer tus miedos es enfrentarlos no importa cuántas veces lo intentes llegará el día que por fin lo logres y pues… parece que si lo logré porque mi esposo dice que parezco una lora que si me tapan la boca me salen letreros por los codos, sin embargo muchas personas han disfrutado de largas y refrescantes conversaciones, obviamente dejando el ego de lado pues para hablar hay que saber con quién, de qué y muy importante cuando, esa es la clave.

Continuando con parte de mi historia ahora tengo un hijo el cual adoro con toda mi alma, es mi orgullo, mi confidente,  y como siempre se lo he dicho a él “mi pepe grillo” haciendo alusión al cuento de las aventuras de Pinocho, porque la función de este era la de ser consejero de Pinocho, y de igual forma, mi hijo por su madurez mental, su buen sentido común, por su sinceridad, porque  sin ningún temor (sin pelos en la lengua) me  dice que tiene luz o que tiene sombra, que es bueno o malo… dulce o salado, de alguna manera, siempre puedo contar con su sensatez, porque me cuestiona  y está siempre dispuesto cuando acudo a  él y a sus acertados consejos .

Él ha enfrentado muchas situaciones en su vida como lo fue el bullyng recibido en su niñez por parte de sus compañeros de clase, por los vecinos y hasta por la familia de mi esposo,  que lo sometían  a burlas, insultos, palabras mal intencionadas, agresiones físicas, buscando así producir en él que se sintiese feo, poquita cosa, pobre y lo más grave de  todo esto, ocasionándole mucho daño tanto mental como físico; todo por el simple hecho de que tenía gafas, era gordito y no estábamos en el mismo nivel económico que estos chacales consanguíneos. Pero todo esto cambio gracias al ingreso en la universidad de Antioquía donde él entendió que valía mucho, porque allá es como un mundo aparte y distinto, donde vales por tu conocimiento y no por tu forma de vestir, tu estrato social, tu color de piel o tus preferencias. Allí él experimentó una metamorfosis en la cual todos sus miedos, complejos fueron eliminados y se transformó física y mentalmente en un ser muy integral con una gran personalidad.

Sant se ha enfrentado a muchas situaciones difíciles pero se ha desafiado  a sí mismo  y ha logrado gracias a Dios  muchas cosas en su vida.

Cuando  Sant, como le digo por cariño,  apenas estaba aprendiendo a conducir tuvo un gran desafío, y fue así,  que en una ocasión,  cuando mi esposo sufrió un accidente,  en el cual se afectó su columna,  había que recoger en la grúa un carro de agencia que teníamos en un centro comercial en Medellín, ya mi esposo había acordado con un amigo para que este manejase la grúa e hiciese el servicio, pero faltando unos minutos este lo llamó y le confeso que él definitivamente no era capaz de conducir un carro tan grande (la grúa mide aproximadamente nueve metros de largo y un peso de cuatro toneladas), que el sólo pensar en ello le producía terror. En fin había que sacar ese carro porque tendríamos problemas con la agencia y por consiguiente perderíamos el contrato con esta, nos angustiamos mucho, pero de repente Sant exclamó y si lo recojo yo, pues nos miramos y sin titubear yo le dije vamos. Mil cosas pasaron por mi mente pero había que vencer los miedos y enfrentarlos, al muy estilo guerrero de Rocky Balboa.

Me senté a su lado e iniciamos al viaje enfrentando la vida y lo que se interpusiese. Allí pude observar en Sant un gran guerrero, vencedor de mil batallas, valiente ante cualquier adversidad, inmerso en un claroscuro mar de emociones, donde las sombras de todo aquello que le hizo daño, lo transformaba en coraje y valor para hacer las cosas y me sentí muy orgullosa de saber que cuando tienes fe y confías en alguien,  no importa qué relación tengas con éste,  puedes hacer milagros en su vida.

Todo salió perfecto, sin ningún contratiempo, él condujo la grúa como si fuera un gran piloto y después de esta situación ya se han presentado  otras ocasiones y él lo ha vuelto a hacer, algo que también trato de aplicar en mí, en cada momento difícil.

En pocas palabras si tienes miedo… canta, grita…haz lo que tengas que hacer enfrentando ese miedo,  para convertirlo en valor, porque ser valiente no es no tener miedo si no saberlo enfrentar… y porque como Rocky lo decía en la película, “no importa que tan duro golpees en tu batalla, importa que tan duro te golpee la vida a ti y que tengas la fuerza una y otra vez para volverte a levantar y seguir luchando”.


Autor

Silvia María Acosta Ruiz, 

La héroe de la grúa

Seudónimo

MANDARRANA.

martes, 5 de enero de 2021

Claroscuro. Vivencias en la grúa. Parte 1. Frontera. Silvia María Acosta Ruiz (La héroe de la grúa)

 


https://www.tvn-2.com/nacionales/taxistas-infringieron-circulacion-removidos-Arraijan_0_5547945215.html


                                      Fronteras invisibles perduran en Bello

                  https://www.elcolombiano.com/antioquia/fronteras-invisibles-perduran-en-bello-AF8263354


Son las doce de la noche, una noche fría y un poco abrumadora, el teléfono repica de una manera intensa de esas que retumba en la cabeza, contesto y la asesora de la aseguradora me pregunta si podemos hacer un servicio de grúa, nos dice que hay un taxi varado detrás de la cárcel de Bellavista en Bello; este es un municipio cercano a Medellín Colombia, el cual tiene un panorama social digamos… bastante crudo en algunos sectores. Pues en aquellos tiempos trabajábamos  para las aseguradoras que aunque pagaban muy poco por los servicios de grúa a sus proveedores, la realidad era que había que trabajar ya que el banco no daba tregua y fue así que después de unos segundos asentimos y le dijimos que si a la asesora y emprendimos el viaje en la grúa, mi esposo como conductor y yo como su ayudante, algo poco usual.

En el trayecto expresamos nuestros temores por la hora y el lugar tan peligroso para dónde íbamos, pero continuamos, las calles para bien o para mal se veían muy solitarias, de nuevo el teléfono repicó y era la operadora para ponernos en conferencia con el cliente, él nos dijo que si nos demorábamos mucho, pero yo le dije que en unos minutos llegábamos al lugar.

Llegamos al lugar en un sector denominado La Gabriela detrás de la cárcel, como les dije anteriormente,  y allí  dentro del taxi un joven de aproximadamente veinte años, la misma edad que en aquel tiempo tenía mi único hijo, de inmediato noté en su rostro el reflejo  producido por la angustia y el miedo juntos en su máxima expresión, Él se baja de inmediato con movimientos que denotaban un nerviosismo absoluto y nos dijo con voz temblorosa que hace veinte minutos “los muchachos"  le habían dicho que quitará ese carro de ahí que estaba en una frontera invisible y que si no lo quitaba lo “pelaban” expresión de la jerga urbana sinónimo de quitar la vida de manera violenta, y que el carro no le encendía y estando  pendiente no era capaz solo de empujarlo. Fue así que entendí el temor de aquel joven, porque lastimosamente en estos barrios existen unas fronteras imaginarias donde grupos que operan al margen de la ley gobiernan y la policía no tiene control de estos,  y al que no acepte sus preceptos lo matan o como ellos dicen lo “pelan”.

Nos miramos, lo miramos y a pesar de que también sentimos temor de que esos delincuentes volvieran a pasar vimos en aquel muchacho  a nuestro hijo de alguna manera, quizás a nuestro hermano, a nuestro primo o vecino, nos armamos de valor y decidimos con velocidad y agilidad casi frenética por los nervios bajar el equipo de la grúa, asumiendo todo con el único y firme propósito de sacar aquel joven en el menor tiempo posible de allí, gracias a Dios y al trabajo en equipo,  logramos subir y asegurar el carro en cinco minutos (en promedio y en condiciones normales esta labor puede tardar mucho más de 20 minutos) y  luego nos fuimos de aquel lugar y lo llevamos a una urbanización en Itagüí donde el residía. No sin antes comentarnos que apenas llevaba dos días trabajando ese taxi y que en ese momento que lo amenazaron pensó que iba a morir, y que lo único que le pasó por su mente fue pedir ayuda a Dios  y cuando nosotros llegamos sintió como si fuéramos unos ángeles enviados por Él, además de  que ninguna grúa estaba disponible por la hora y el lugar tan peligroso donde se varó, la paradoja de las oportunidades  donde la necesidad de unos se convierte en la salvación de otros.

Al final saber esto nos reconfortó mucho pues haberle ayudado, hace entender que las pequeñas acciones generan los más grandes resultados y evitamos que le ocurriera  algo malo a aquel jovencito y eso fue lo más importante, quizás el mayor de los pagos… el deber cumplido, pues si no vives para servir no sirves para vivir… algo muy olvidado por esta sociedad moderna.

Tristemente vivimos en Colombia un país  con  ciudades que tienen unos barrios donde la ley la tienen los grupos ilegales que siembran a su paso solo  terror y muerte.

Un Medellín estigmatizado por Pablo Escobar, un Medellín claroscuro  con sus luces y sus sombras que trata de reflejar ante el mundo que Medellín ha cambiado, que sólo es  flores, emprendimiento, innovación, que es la tacita de plata, pero  todo esto contrasta  con una realidad muy oscura que  pocos muestran, pero que en el corazón de los antioqueños todos sabemos.

Medellín y muchas ciudades de Colombia  también son hambre, pobreza, prostitución, violencia, drogas y  falta de oportunidades, donde hay corrupción en  sus gobernantes, donde los jóvenes de las comunas pobres muchos de ellos consumidores de drogas psicoactivas solo anhelan tener ropa de marca, un arma, una motocicleta de alto cilindraje y tener el dinero para conseguir todo aquello, no importando si para ello se tengan que unir a grupos ilegales ya sea de forma voluntaria o bajo amenazas a  ellos y a sus familias.

A diario  matan líderes sociales que su único fin es el de ayudar a salir a  todas estas personas del atolladero en el que encuentran, razón por la cual los asesinan o los desaparecen.

Quisiera que algún día todo esto cambiara pero va a ser muy complicado, empezando que la televisión nos bombardea a diario con  series de narcos donde nuestras futuras generaciones se están creando en su imaginario falsas ideas de mundos donde la droga atrae riqueza, poder y destrucción, de alguna manera la sobrepoblación nos lleva a un hacinamiento que no justifica la delincuencia pero si la alimenta.

Si las cosas  siguen así  estaremos una y otra vez condenados a repetir la misma historia, tal cual como ratas en el universo 25, porque aunque los paisas nos ufanamos de pujantes, trabajadores y verracos, estas condiciones degradan cada vez más nuestra agonizante sociedad.

Por favor tengamos siempre presente  que las pequeñas acciones generan grandes resultados, acompañemos más a nuestros hijos, tratemos de ser mejores personas.

Que en conjunto hagamos que  este claroscuro Medellín lo enciendan  las luces de la esperanza, transformación  y justicia social.


Autor

Silvia María Acosta Ruiz

Seudónimo

 Mandarrana