lunes, 5 de marzo de 2012

¿Por qué estás triste?, por favor calma, esto pasará

Todo nace, todo crece, todo muere, pero la vida  a diario,  hace actos heroicos para que todo se renueve; esa es la fuerza que hace que estemos vivos, mientras el viento nos mueve y este planeta en los nidos de sus ramas nos envuelve.
 ¿POR QUÉ ESTÁS TRISTE?, POR FAVOR CALMA,  ESTO PASARÁ
Calma, mucha calma para asumir los momentos difíciles, después de todo, sólo son eso, momentos, déjalos pasar, como las aguas crecidas de un rio, luego llegará la calma, repítete mientras esto ocurre, esto pasará, calma, que pronto esta pesadilla terminará y me hará más fuerte para luchar, frente a la adversidad.
No te desesperes por lo que ocurrió, ya pasó, no tienes porque rumiarlo ni dañarte este momento,  con algo que ya no te pertenece, perdónate, perdona a los demás, para que no guardes rencor,  que te dañe el alma y te impida vivir el bienestar de este momento; todos somos humanos y nos equivocamos, detrás de los malos, frecuentemente hay un enfermo mental sin tratamiento, no permitas que te afecte, sigue tu camino ayudándole,  si puedes,   sin hacerle más daño del que ya tiene.

Deposita en el cesto de la basura tus culpas, miedos y arrepentimientos, ellos te limitan y roban contento.
Evalúa tus pensamientos, si sólo le das importancia a los malos momentos, a tus defectos y errores,  a lo negativo; esta es la oportunidad de cambiar el espejo,  donde te estás mirando, porque te irá muy mal, porque cometerás muchos errores,   a consecuencia de haberte programado para ver en la vida el lado negativo, oscuro,  esto te amargará y afectará a las personas con quienes convives.
Evita las injusticias, dañar a los demás, el maltrato, las humillaciones, el ultraje, la contaminación en cualquiera de sus modalidades,  el odio, la venganza, la violencia, la indiferencia, la vida fácil, la mentira,  la hipocresía,  el engaño y explotar a los demás.
Felicítate porque  ya le das más importancia a lo que has aprendido de tus errores y no temes equivocarte,  ni a la burla de los otros,  frente a tus defectos y equivocaciones, ya tienes claro que para abrirte al triunfo,  tienes que trabajar duro y equivocarte muchas veces, haciéndote héroe con cada uno de tus desaciertos.
Alégrate cada mañana,  aunque en la noche antes de acostarte,  hubieses querido amanecer muerto, resucita, trázate metas, mantente ocupado, recuerda que es salud y cada meta es una razón para vivir, aunque debes sacar momentos para el ocio y descanso.

Si algo no salió como querías,  tranquilízate, deséalo ardientemente, trabaja para ello,  y pronto llegará lo que soñabas.

Mantén amigos, desahógate, comenta tus sufrimientos, ello te hará más llevaderas tus cargas.
Comparte, escucha música, aliméntate bien, escribe, empieza a aceptarte, desde tus fotografías, tu voz, tus trabajos, vístete bien, regálate de cuando un premio; que no pase un mes por favor, sin hablar con un anciano, con un niño, con un adolescente, con el miembro más alejado de la familia, con un habitante de calle.
Si te sientes muy solo,  regálate una mascota, mímala, cuídala, verás cuán sano y optimista estarás.

Revisa tú álbum fotográfico, tu ropero, y dedícate un día para lucir como una estrella, con el corte de cabello y la prenda de vestir que mejor  haga lucir tu silueta.
Toma fotos, navega en  internet, visita lugares bellos, habla con gente interesante, disfruta viendo las abejas, las hormigas, los niños jugar, la ciudad en la mañana transitar, en sus atardeceres, al anochecer.

Atrévete a cometer alguna locura, a estar solo, a ser tu mismo sin necesitar,   al menos por unos días,  de las personas de quienes dependes económica o emocionalmente, ello te hará fuerte, independiente, libre.
Si hay corrupción, injusticia y crees no soportarlo, acepta  que la justicia tarda, pero llega, que el fruto que se madura y pudre en el árbol, cae y después de ello,  la planta sobrevive,  y vienen nuevas cosechas.

Recuerda que todo tiene su tiempo, que todo llega y se va, que somos viajeros, a veces muy cargados, a veces muy ligeros; y es  precisamente, cuando más livianos estamos, que mejor navegamos, que mejor funcionamos, que más progresamos, porque los apegos terminan cosificando,  fosilizando.
Olvídate un poco de ti cuando sufras y empieza a ayudar a alguien vulnerable,  y verás que bien te sentirás.
Evita que te programen o manipulen tu vida, evita los excesos y el consumismo, atrévete a cambiar los muebles, pensamientos, recorrido, oficio,  ideas, y si eres un mártir en la relación que llevas actualmente, abandónala, busca nuevas oportunidades, busca lo mejor, renuévate, nunca te sientas viejo; emprende miles de empras, negocios y aventuras, una de es aventuras ha de ser tu trabajo,  para que no se haga carga,  para que no te vuelva esclavo.
Estudia, progresa, disfruta de lo que eres; interroga tus pensamientos juegos, gustos, necesidades,  tus enfermedades, juega con ellas, hasta hacerlas marchar, para ello rodéate de gente buena que te cuide y ame,  y si no lo puedes hacer; tú mismo amate y cuídate; evita la perfección,  el fatalismo, el facilismo, los fundamentalismos, la programación; sé una caja de sorpresas con una canción original para cada día.
Llora si quieres, ríe a carcajadas, revuélcate en el agua, la arena, la hierba, mira la noche,  la luna, las estrellas, las gotas de lluvia, las aves, canta, ¿Cuánto hace que no cantas? nada, trota, abraza y déjate abrazar  y besar.
 Camina descalzo por la hierba, suelta por un día, computador, celular, televisor, verás cuán independiente puede ser, como te relajarás, disfruta de tu propia soledad, de tu propio silencio, que te harán sabio, sensible, más humano.
Comparte con  tu familia un paseo de olla,  donde alrededor del fuego se reparta el alimento.
Haz el amor en una noche estrellada,  cerca a una hoguera, en un lugar romántico, inaudito, misterioso, y luego ríe con tu pareja,  tomándola de la mano,  bajo el sol o la luna; esos,  son momento que nunca olvidarás.
Sueltas papeles, maletines, lapiceros, llaveros, alarga tu mano y acaricia con ternura, con pasión,  sin afán, saca tiempo para ti,  que seas tú quien trabaja para el tiempo,  y no el tiempo trabajando para ti,  reduciéndote a milésimas de segundo.
Se feliz, defiende con valentía tu única patria,  tu único continente, país, universo, planeta y galaxia,  que te pertenece: ¡tú propio ser!.