lunes, 12 de marzo de 2012

Gracias

Agradecer a tiempo , cuando la sabia recorre su planta, cuando la alegría a sus miedos espanta, cuando la araña los hilos de su red en su solitario rincón, con maestría ensarta, cuando la niñez por unos minutos, se ha hecho santa, cuando la vida en invierno nos cubre con su cálida y suave manta, cuando esta existencia de vivir aún no se jarta.
GRACIAS

Que corto es el tiempo,
¡cuán efímero en los trópicos!
en los lugares en donde,
florece y se apaga la vida,
en donde, traviesos suelen
jugar el verano y el invierno.
Que infinito es el tiempo
para dar gracias desde la distancia,
por haber sido la mano que nunca vi,
la luz de una mirada a la que nunca
en la oscuridad, le contemplé su destello.
Por haber sido la palabra
que un día fue promesa,
la que hoy hizo
realidad mis deseos.
Gracias desde mi tierra,
o desde la tuya,
o desde cualquier lugar
de esta amplia esfera,
por permitirme abrir
la maleta de mis anhelos,
y como del blanco pañuelo,
de un mago avezado,
dejar escapar las palomas
de mis sueños,
antes de caer las hojas
tibias, amarillas,
del próximo otoño.