domingo, 24 de noviembre de 2019

Cinco pasos, o etapas que se deban tener en cuenta previas a la toma de la decisión de pasar de empleado a empresario

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1. EL PRIMERO ES DEJAR TU TRABAJO, Y EL SEGUNDO, EMPEZAR UNA COMPAÑÍA: Dejar la zona de confort donde te encuentras aburrido y lanzarse a buscar calidad de vida, en lugar de permanecer frustrado el resto de tu vida con un empleo que se ha convertido en una tortura diaria por lo que se vive, se hace y se siente.
2.  DETERMINA QUÉ TE GUSTARÍA HACER, PIENSA SI OTROS PAGARÁN POR ELLO: Lánzate en una propuesta de empleo que te guste, no la que te ha sido empuesta por otros y las condiciones apremiantes familiares y sociales, evita ser fatalista, permítete soñar y programar tu mente para levantarte en  tu intento las veces que sean necesarias.
Se realista, busca algo que se venda, busca necesidades de mercado en tu barrio, en otros lugares, la plata está cerca,  no es sino buscar la oportunidad para recogerla.
 3. ENTREVISTA A CLIENTES IDEALES, ESTABLECE TU NEGOCIO A PEQUEÑA ESCALA, EVALÚA LA RETROALIMENTACIÓN Y HAZ AJUSTES, CONFORMA UN EQUIPO, ASEGURA EL FINANCIAMIENTO: Busca gente que necesite servicios, que quiera la prestación que tú le ofrece,  y esté dispuesto a pagarte por ello, empieza tu pequeño negocios, bien atendido, con todo lo necesario, crea fidelidad en la clientela por tu excelente servicio, y amplíalo a futuro,  cuando vaya adquiriendo solvencia y estabilidad económica.
 Permanentemente aplica la matiz DOFA para evaluar las ganancias y pérdidas,  y la forma de convertir las pérdida en ganancias, ten un equipo solvente de apoyo financiero, de publicidad, de logística, de servicios generales, delega y evalúa eficiencia, escoge muy bien tu personal de servicios, siempre ten presente quien te va financiar, especialmente los primeros años de tú negocio, época en que se está posesionando en el mercado.
 4. DEFINE LA ESTRUCTURA DE TU EMPRESA, RENUNCIA, ESTABLECE UN PRESUPUESTO DE TRABAJO, ESCALA TU NEGOCIO DE ACUERDO CON UN PLAN DE NEGOCIOS:
Finalmente no lo pienses más,  lánzate a la aventura de crear tu propio negocio: de nada vale quejarse si no te atreves,  y crear un empleo donde tú seas tu propio jefe, se quien conduce la barca de tu vida, no se la dejes a otros.
Escala tu negocio, estructúralo, planéalo, es así como para lograrlo, Marleny propone “objetivos claros, conocer la actividad”, importante invertir tiempo en el estudio de mercado antes de invertir dinero, todo lo que se ve no es real, a veces es solo apariencias, darse tiempo y actuar con mentalidad innovadora, que implica necesariamente tomar riesgos.
Como lo plantea Angie Samantha: “define  cual va ser la ruta para ofrecer tu producto o servicio, cómo serán los medios que usaras para hacer visible tu negocio y has pruebas antes de hacer un lanzamiento oficial”.
Indispensable adoptar lo planteado por Adrian Alberto: “definir la estructura de la empresa al mismo tiempo decidir qué miembros la integrarán para hacerla registrar en la cámara de comercio, definir los roles de inversión de cada uno de los miembros de mi equipo y plasmar términos y condiciones de los mismos”.
Ya lo dice Yuleidy, hay que retroalimentar, “con la prueba ya sabrás que está fallando y podrás mejorarlo, además de reforzar lo que ya es bien recibido por los consumidores”.