Que me importa,
si los tiempos cambian,
si la tristeza me espanta,
si la alegría se acorta.
Que me importa,
si los demás de mí,
ya no aceptan nada
por un error que cometí.
Que me importa,
si el tiempo
se alarga,
o se acorta.
Que me importa,
si hace lluvia o calor,
si perdí toda ilusión,
si llega la alegría, o el
dolor.
Que me importa,
si mis monedas
rompen mi bolsillo,
y por su roto, todas se van.
Que me importa,
la suerte y el azar,
si tengo que terminar,
y volver a comenzar.
Que me importa, el qué
dirán,
si ninguno de ellos,
hizo por mí, lo que
se han
empeñado en reprochar.
Que me importa,
si soy grande, o
pequeño,
si soy gordo, o flaco,
si soy bonito, o feo.
Que me importa,
si mi cuerpo es completo,
o le falta algo, que me lleva,
a no mirarme al espejo.
Que me importa,
si se mucho,
o la ignorancia lo es
es todo.
Que me importa si vivo en una mansión,
en el país más pobre o rico,
si tengo títulos,
o subtítulos.
Que me importa si estoy enfermo,
o aliviado, si me quieren,
o vivo a solas,
sin nadie que me envélese.
Que me importa si mi cordura es de genio,
o si soy despreciado por mi mal genio,
que me importa, si lo
tengo todo
o no tengo nada.
Que me importa
si no sembré un
árbol,
escribí un libro,
o tuve un hijo.
Después de todo,
me queda el orgullo,
de haber vivido con
lo que he elegido.
Hoy me doy el lujo
de vivir un
privilegio,
que pocos no afrontan,
vivir como he querido.
Así, genuino, libre,
sin presiones, ni
condiciones,
vivir como,
¡Que me importa!
