lunes, 18 de junio de 2012

Capricho o terquedad


Apagar el calor del nido cuando la fuerza del amor se ha extendido cada vez más, es encender la mecha que nunca se podrá olvidar,  porque  en su intento, nos hará quemar. 



CAPRICHO O TERQUEDAD


Agua fresca que calmas mi sed

que con ansias mi ser te reclama

brisa veraniega, habrá un después?


Sensiblemente te presiento

en la lejanía de tus pasos

tu mirada con fuerza la siento.


Los lugares recorridos

son nidos tibios

recreando  lo vivido.


Tu voz hecha un himno de explendor

el viento me la devuelve

con celestial murmullo de amor.


Suavemente mis manos

serpentean  la cubierta

haciendo cercano lo lejano.


No, no, no, no... iNo!

necesito tus  palabras

para  poderte olvidar.


Si, si , si, si...iSi!

necesito tu presencia

para amarte una eternidad.



Acaso será capricho, terquedad

rebeldía,  veleidad o ansiedad

pero, ¡cada día te necesito más!